Sandra Rossi octubre 18, 2022

La vida en otoño significa retomar la rutina

Hola mis fieles, furtivos y apreciados lectores, espero que todo esté bien por allí en el mundo, y en vuestro universo,

Otoño siempre es esa época en la cual retomo tantas cosas de mi vida, organizo la rutina de los próximos meses y me vuelvo bastante reflexiva, es decir esas cosas que eludo en el verano por las vacaciones, la bohemia y el horario inexistente o flexible las organizo en otoño, porque el otoño representa un nuevo comienzo, una nueva etapa, o la continuación de cosas que se detuvieron en el codiciado verano.

La vida en otoño significa retomar la rutina de la vida es el momento perfecto para un reinicio mental, físico y doméstico, internamente e inconscientemente ponemos el cronómetro de arranque de lo que será nuestra vida en los próximos meses y nos toca aceptar la lentitud y las recargas de obligaciones de la nueva temporada después de un verano largo, caluroso relajado y puede que ajetreado de tanto divertimento.

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Al reflexionar en esta época del año, hay que intentar no caer en tristezas y debilidades mentales, no darle fuerza a la pereza o a la nostalgia por lo que hemos dejado atrás. En otoño, se trata de retirarse hacia adentro, volverse introspectivo y trabajar en el yo interior; hacer planes que nos hagan la vida más fácil, mantenernos fuertes a pesar de lo aburrida que puede ser la rutina, el equinoccio de otoño es muy importante para honrar ese cambio, listo para los meses más tranquilos y más fríos.

A mi particularmente, otoño me vuelve reflexiva y nostálgica, me cuesta arrancar la rutina, sin embargo, ahora estoy trabajando mi fortaleza interior, la parte positiva que todos tenemos y aparcando la melancolía, creo que mucho influye en el estado de ánimo en los cambios de estación el lugar donde vivamos, es decir si es un sitio que te ofrece variedad de actividades o simplemente es un lugar sin vida, como es mi caso.

A medida que nos reconciliamos con nuestras rutinas, las temperaturas bajan y pasamos más tiempo físicamente adentro, es un momento óptimo para adoptar la introspección positiva en general: mirar dentro de nuestras mentes, dentro de nuestros hogares y dentro de nuestros comportamientos, cambiar todo aquello que nos afecta o estropea el futuro. Hacer algún cambio, aunque sea minúsculo, eso ayuda.

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Emocionalmente, el otoño se presenta así para muchas personas, golpeando el espíritu, básicamente porque las rutinas apagan ese fuego interior y esa paz y libertad que proporciona el relajado verano.

El cambio de temperatura tan marcado, los días grises, a pesar del hermoso color amarillo-naranja de las hojas que se desprenden de los árboles, todos esos detalles nos afirman y afianzan que se avecina un cambio, que la tranquilidad la dejamos atrás y que debemos ajustarnos y adaptarnos a un nuevo estado de ánimo, a unas responsabilidades rutinarias y a un clima que nos ensimisma y del cual debemos tener temple para sobrellevar.

Reflexiones de vida

Insisto, de eso se trata, de organizarlo todo para llevar nuestros propósitos adelante, para no agobiarnos y sentir que nada vale la pena, la vida hay que aprovecharla, sea la estación que sea.

Al final de todo, lo importante es sentirnos bien con nuestras decisiones y recibir el próximo verano con satisfacción y llenos de alegría, orgullosos de que lo hicimos bien, la vida es un circulo por el que transitamos mientras existimos, de los colores y la actitud nos encargamos nosotros para no aburrimos de la obligada rutina.

Hasta Otra!